Javier Bátiz, el pionero del rock mexicano, muere tras una valiente batalla contra el cáncer

“Queridos amigos y familia, para informarles que nuestro adorado y querido, mi esposo Javier Bátiz trascendió el día de hoy. Su legado y su música quedan para la eternidad. Te amo amor mío. Vuela alto mi ángel”, se lee en el mensaje compartido por Claudia Madrid que acompaña con una foto de ambos.

La salud de Bátiz, quien fue mentor del guitarrista Carlos Santana, estaba complicada desde marzo, cuando se sometió a una cirugía; en junio estaba mejor y se mantenía optimista. Hace seis meses admitió que gracias a la música se mantenía con ánimos para seguir adelante. “No hay otra forma de salir de esto que mantenerse alegre, ver a los amigos, platicar, celebrar, hacer música, seguir tocando. Eso es lo que quiero, eso es lo que me ha mantenido bien durante tantos años, la guitarra, sólo quiero salir de esto para tocar”, aseguró.

Javier Bátiz, conocido como el “padrino del rock mexicano”, nació el 3 de junio de 1944 en Tijuana, Baja California. Desde joven, mostró una gran pasión por la música y fundó su primera banda, Los TJ’s, en 1957. Con esta banda, Bátiz fue uno de los primeros músicos mexicanos en interpretar rock and roll en español.

A lo largo de su carrera, Bátiz fue reconocido por su virtuosismo con la guitarra y su habilidad para fusionar elementos de blues, rock y música mexicana. Algunos de sus álbumes más destacados incluyen “Javier Bátiz y los Famous Finks” (1963), “Coming Home” (1969) y “Rockin’ with the King” (1970).

En cuanto a su batalla contra el cáncer, Javier Bátiz enfrentó el desafío con valentía y determinación. A pesar de los tratamientos y las dificultades, continuó tocando y compartiendo su música hasta el final. Su lucha contra la enfermedad inspiró a muchos de sus seguidores y compañeros músicos.

Entre sus logros más destacados se encuentran la popularización del rock and roll en México, la influencia en generaciones de músicos, incluyendo a Carlos Santana, y la recepción de numerosos reconocimientos y honores a lo largo de su carrera. En noviembre de 2024, recibió las llaves de la ciudad de Tijuana en reconocimiento a su impacto cultural.

Javier Bátiz dejó un legado musical que continúa inspirando a nuevas generaciones de músicos y seguidores del rock en México. Su memoria y su música vivirán para siempre en los corazones de quienes lo admiraron.